¡Tips para recién nacidos!

¿Eres mamá o papá primeriza? Tranquila, te compartimos algunas recomendaciones sobre los cuidados del recién nacido.

Es importante que cuentes con algunas herramientas que te ayudarán a su cuidado un ellas es una silla infantil para carro desde el primer momento, desde la salida de la clínica con el bebé. Debes de revisar el tipo de silla y asegurarte de que esté bien instalada.

  1. Ten un buen espacio preparado para el descanso de tu bebé

Ten en cuenta que el descanso de tu bebé de ser en un lugar seguro, para esto puedes ubicarlo en la misma habitación en la que tu duermes, pero no debe estar en la misma cama.

Tu bebé debe dormir en posición boca arriba, en una cuna. No ubiques dentro de la cuna cobijas, juguetes, mantas, peluches, almohadas, cojines, ni protectores

  1. Carga a tu bebé de manera correcta

Desde el primer momento en que que tu bebé este contigo vas a querer protegerlo y cuidarlo y tu instinto te enseñará como hacerlo. Sin embargo, debes recordar la importancia de lavarte las manos antes de cargarlo, presta atención a la forma como sostienes su cabeza y el cuello. Debes sujetar la cabeza suave pero con firmeza, apóyalo en tus brazos o usa tus manos.

  1. ¿Cómo bañar a tú bebé recién nacido?

Algunos profesionales  mencionan que el primer baño de tu bebé se realiza cuando se cae el cordón umbilical y el ombligo se cura completamente.

Antes de bañarlo debes probar la temperatura del agua con tu codo o muñeca, debe estar tibia y prepara todos los elementos que necesites antes de empezar.

El baño inicia por la cabeza, y luego va descendiendo a la zona genital. Ten presente: usa jabón suave, sin fragancia, puedes usar una esponja o un paño para bañarlo. Y para secar a tu bebé envuélvelo bien en una toalla con capucha para mantener abrigada su cabecita.  No uses talcos, y la crema antipañalitis solo en caso de ser realmente necesaria, su uso no es diario.

 

  1. La alimentación de tu bebé

Es importante darle leche materna de forma exclusiva durante los primeros seis meses, sin incluir ningún otro alimento, y hasta los dos años o más, según decida mamá y bebé.

UNICEF y la OMS, además de lo anterior, recomiendan empezar la lactancia máximo en la primera hora posterior al nacimiento. “La lactancia materna favorece el desarrollo sensorial y cognitivo y protege a los bebés contra enfermedades infecciosas y crónicas”, entre otros muchos beneficios.

Siempre que veas que tiene hambre, por ejemplo, cuando se despiertan, o lloran llevándose los dedos a la boca. Entre una toma y otra no debe pasar más de tres a cuatro horas. Para saber si tu bebé ya está satisfecho presta atención a cuando se aparta de la teta o el biberón.

  1. Conecta con tu bebé

La conexión con tu bebé esta incluso antes de su nacimiento, pero es importante fortalecerla de manera física y emocional. Es por esto que cargarlos, arrullarlos, cantarles, hacer contacto “piel a piel”, acariciarlos, hacerles masajes son prácticas muy beneficiosas.

El apego seguro ayuda a tu bebé a desarrollarse en diferentes aspectos, que más adelante le servirán durante toda su vida.

Las típicas creencias o frases de “dejar llorar al bebé” para que desarrolle los pulmones, o no sea “malcriado” no tienen ningún fundamento. Tú bebé va a llorar para comunicarse contigo, para decirte que necesita algo, es la única forma que tiene para hacerlo. Seguro nuevamente tu instinto te dirá que debes atenderlo, confía.

Fuente: Doctor Akii

https://www.doctoraki.com/blog/pediatria/7-consejos-para-el-cuidado-del-recien-nacido/

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